Mil, mil, mil perdones ahora si tengo un buen motivo para no postear y es que estos días los he tenido ocupados afortunadamente y pues eso trae como consecuencia que este blog este un poco olvidado, mañana ya estaré mal holgado de tiempo y podré ponerme a mano, todo ha sido por buenos motivos y por cosas que valen la pena.
No hay mucho que contar por el momento, pero si mucho que hacer, ¡acá andamos!.